Al otro lado de la isla


La realidad se subdivide en microcosmos. Hay una ventana hacia la realidad de una bloguera cubana que expone sin rodeos la cotidianidad en la isla y así narra cómo ir a la playa puede ser una odisea de 3 días para obtener el ticket, cómo la netiqueta y los derechos cibernéticos no aplican en su comunidad o cuestiona el por qué una persona debe soportar la violencia. De esa forma Yoani comparte con miles de lectores esos detalles que a lo mejor podrían pasar desapercibidos entre tantos microcosmos que comparten nuestra realidad.

A continuación algunos párrafos de los posts que, junto a los demás que conforman Generación Y, la hicieron acreedora del Premio Ortega y Gasset, que otorga el diario español El País, en la categoría de Periodismo Digital.
"Cómo hacerle saber a una mujer que huye de su casa para no enfrentar los puños del marido dónde hay un refugio para pasar la noche, si no a través de los medios informativos. De qué forma conocerá ella sus derechos de llevar al atacante ante los tribunales si la tele y la prensa no hablan del asunto. Cómo crear repudio social hacia los abusadores cuando apenas podemos conocer que existen las víctimas. Las vemos aguantar, esconder bajo el colorete las trompadas y mirarnos, a ver si nos damos cuenta de lo que las instituciones y los medios parecen no notar".
"A ver si logro entender la lógica torcida de nuestro espacio virtual: “un ciudadano cubano no puede comprar su propio dominio web y alojarlo en un servidor local, pero es acusado cuando logra hospedar su sitio en otro país”; “los blogger oficiales reflejan la realidad, pero nosotros los alternativos somos marionetas de algún poder extranjero…”; “Internet es un terreno para una llamada batalla de ideas, de la que nadie puede enumerar al menos un principio que no sea la intolerancia…”; en fin, además de mutilados en nuestra sociedad, hemos entrado a Internet con varios pedazos de menos".
"Robin Hood ya ha repartido todas las riquezas arrebatadas. En un principio los pobres estaban contentos y aullaban de felicidad en cada esquina del bosque. Poco tiempo después comprendieron que el gran bandolero de Sherwood sólo sabía redistribuir la riqueza, pero no crearla".

Foto. Desde Cuba

Comentarios

  1. que buen blog tienes! felcicidades

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  2. Hola! gracias por tu visita y por el comentario, me alegra y motiva a seguir con el blog, saludos =)

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